—Hola, ¿me puedo sentar acá?
Levanto la mirada. Lleva un avatar de muy baja estatura, con piernas y brazos largos y piel escamosa entre el azul y el plateado, con agallas en el cuello y unos ojos negros y profundos que parecieran no tener párpados.
—Sí.
—¿Te gusta?
—¿Qué cosa?
—El paisaje.
Miro alrededor: el cielo entre el amarillo y el naranja que tiñe de colores cálidos el parque y sus árboles desperdigados, algunos users que pasean por el camino que bordea los sectores de recreación, otros sentados en los bancos a un costado del sendero.
—Sí. Por eso vengo acá cuando necesito despejarme.
—A mí también me relaja hacerlos.
—¿Vos hacés los espacios de PauseTime?
—Sí. Todos los ciclos diseño uno nuevo. Pero cuando los miro no puedo parar de pensar cómo podría mejorarlos y eso no me permite disfrutarlos del todo.
—¿Y paga bien?
—No me quejo. Hay cosas peores. Y vos, ¿qué hacés?
—Busco… —me detengo, estoy en la mira y cualquier desliz podría empeorar la situación— busco cosas difíciles de encontrar.
—Misterio… ¿trabajás para algún proyecto confidencial?
Algo en su tranquilidad me genera confianza y quisiera asentir pero hasta ese mínimo detalle me podría jugar en contra. Ella sonríe y mueve las agallas del cuello.
—Podés hablar tranquila.
—¿Perdón?
—No nos pueden vigilar acá.
—¿Te conozco?
—Soy Artha. Nos cruzamos en XY el otro ciclo.
Intento recordar pero lo único que me vuelve es un hueco negro y una sensación de vértigo.
—¿Tenías otro avatar?
—Siempre. Y ya te había visto sentarte en este mismo banco varias veces.
—¿Por qué decís que no nos pueden vigilar?
—El diseño está intervenido. No sé si no lo saben o si lo saben y están jugando conmigo, nomás.
—¿Quiénes?
—Quien sea que controle este espacio… Controlar. Inspeccionar. Regular. Dominar. Alguien tiene que administrar todo esto, ¿no? Preferiría creer que sí…
Sus palabras me recuerdan a las teorías de esos users que aseguran que todo es un gran experimento. Conspiracionistas. Decido seguirle el juego.
—¿En serio diseñás para PauseTime?
—Sí. Pero no paga tan bien.
—¿Qué generación sos?
—F4. Y vos B5. Hace mucho tiempo que estás dando vueltas.
—¿Cómo sabés qué generación…?
—Una hace sus averiguaciones, Lula… Como te dije, no es la primera vez que te veo sentada acá. Una tiene que conocer a sus users. Contame, ¿qué hacés aparte de despejarte con mis placenteros paisajes en PauseTime?